sábado, junio 30, 2007

Destiempo


Hace mucho tiempo que no sentía la necesidad de escribir. Y es que hay momentos en los que el roce de las sílabas por los labios no bastan. Es ahí cuando se comienzan a teclear palabras con emoción.
Extraño.
La forma de mis letras.
Extraño.
No ser tan cotidiana.
Y siento frío, siento como mis dedos se congelan antes de poder llegar a las palabras precisas. Todo porque no sé como expresar lo que que está demasiado dentro.
No se trata de amor, de estudios ni de familia. Se trata de mi. Se trata de poder comprender que no es necesario vivir a destiempo.
Y a veces, sólo a veces, vivo a destiempo.
El otro día vi La fuente. Lloré casi toda la película. Y comprendí que los hombres, la gran mayoría, no se dan cuenta de lo que tienen hasta que lo pierden. No excluyo a las mujeres, también nos sucede. En realidad, es una condición humana. Condición maldita.